EL ESCENARIO CAMPESINO

El movimiento Nacional Campesino Indígena y su rol en la política actual. Su posición sobre el decreto de necesidad y urgencia (DNU) relacionado al mercado de semillas. Monsanto y el agronegocio. El trabajo del Movimiento Campesino de Liberación en las organizaciones agrarias. El presupuesto negado a la Agricultura Familiar. Por Federico Paterno

Diego Montón, integrante de la Coordinadora Latinoamericana de Organizaciones del campo (CLOC) y José Luis Livolti Coordinador del Movimiento Campesino de Liberación (MCL) dialogaron con A.N.C.A.P y analizaron la situación del campesino en la actualidad.

El MCL tiene un trabajo que lleva adelante en las provincias de Misiones, Santa Fe, Córdoba y Salta.  Está conformado por pequeños productores y agricultores familiares sumando también a los tamberos organizados en el sur de Santa Fe. En 2008 se corrieron de la Federación Agraria tras las alianzas que llevó adelante la misma. Este movimiento, integra la Coordinadora Nacional de Organizaciones Campesinas de Trabajadores Rurales de Argentina (COSITRA); siendo a su vez parte de la CLOC.

La CLOC articula la participación de Movimientos campesinos y agrícolas que nacen del proceso de neoliberalismo en América latina. La identidad de lucha que tiene la organización está basada en el trabajo de la tierra con una posición política referida a los lineamientos de la Revolución Cubana y con un carácter anticapitalista, según explicó Montón.

Diego Montón.
Diego Montón.

POR DECRETO

Al momento de consultarle a Livolti sobre el DNU de semillas que dictaminó el Kirchnerismo hace 30 días advirtió que “Ya estaría en el Congreso para ser tratado y que sea ley.  El derecho intelectual sobre la semilla es una vuelta de tuerca más a favor de las multinacionales del sector. Más allá de que el Gobierno tenga buenas intenciones y lo presente de forma elegante se está esquivando a la ley de semillas. Nos meten en un debate de fondo que le puede traer problemas, ahora con el DNU hay un canon para cobrar a los grandes productores y a los pequeños no. Esa semilla en definitiva debe tener un debate que está postergado en la Argentina y ese debate tiene un actor fundamental que es Monsanto. Hoy por hoy es el dueño de la semilla en Argentina. Nos guste o no es así”.

Diego Montón, quien integra además de la CLOC, el Movimiento Nacional Campesino Indígena (MNCI) se refirió también  al DNU y aseguró que las semillas son patrimonios de la humanidad y son producto de un trabajo sostenido de las comunidades indígenas y de los campesinos que hace miles de años lo vienen sustentando.  “Cuando hablamos de un maíz transgénico, estamos hablando de un maíz de unos 40 mil genes, y uno solo es el que una corporación transforma adulterando con un gen de otra especie; 39.999 genes son parte de este patrimonio colectivo, no vemos la lógica para sostener esto. Rechazamos todo tipo de propiedad intelectual sobre los bienes naturales”.

En nombre del MNCI, Montón, expresó su rechazo a todo tipo de propiedad intelectual sobre las semillas y, su restricción de uso, además marcó la oposición a que el campesino deba estar en un registro de uso propio. “Queremos que se planteen algunas herramientas como regular y obtener rentas tipificando al actor del agronegocio”.

Según informó el Ministerio de Agricultura Ganadería y Pesca de la Nación, el Ministro de esta entidad, Carlos Casamiquela y el Jefe de Gabinete de la Nación, Aníbal Fernández se reunieron con “representantes de la cadena productiva”. Casamiquela expresó en referencia al DNU que hay un “consenso entre el Estado y los diversos actores”. Sin embargo Livolti del MCL advirtió  “Nosotros no fuimos consultados para tal consenso. Es decir todo el espacio del Consejo Nacional de la Agricultura Familiar, nos dio aviso cuando ya estaba todo encaminado”.

Jose Luis Livolti.
Jose Luis Livolti.

El referente del MCL subrayó que se deben contemplar los verdaderos derechos de los agricultores familiares y no que se esquive solo con suspender el canon a los pequeños productores.  “Los agricultores familiares están comprendidos dentro de los pequeños productores, se debe reparar que somos la mayoría y que no usamos semilla transgénica para producir. Nos preocupa mucho porque esto viene a profundizar la dependencia de las empresas multinacionales con el sector encabezadas por Monsanto y Singenta”.images

Cabe destacar que la Presidenta de la Nación, Cristina Fernández, en el 2012 en el Consejo de las Américas dio aviso de la instalación de la planta de maíz transgénico en Malvinas Argentinas (Córdoba). Hoy frenada tras la resistencia que impusieron los vecinos nucleados en la asamblea Malvinas Lucha por la Vida.

En ese mismo año la Presidenta aseveró “La inversión de Monsanto es importantísima y va a ayudar a la concreción de nuestro plan, tanto agroalimentario 20-20, como nuestro plan industrial. Me decía su titular que les había impresionado mucho el apoyo que nuestro Gobierno estaba dando a la ciencia y a la tecnología”.

NUEVA SEMILLA

El día 17 de abril fue el elegido para dar a conocer la aprobación de la nueva semilla transgénica de la empresa Dow Agrosciences Argentina S A.  La hace particular su resistencia a los agroquímicos: 2 ,4- D, glifosato y glufosinato. El Ministerio de Agricultura ganadería y pesca lo dictaminó a través de la resolución Nro 98/15.

Según informa la página web de la Universidad Nacional de Córdoba el 2,4-D es un agroquímico que está comprobado científicamente que afecta a microorganismos del suelo que favorecen el crecimiento de los cultivos. “Los estudios de laboratorio realizados por nuestro grupo de investigación permitieron demostrar que el 2,4-D a traviesa la cáscara de huevos fértiles de gallina tratados externamente con 3,1 mg del herbicida (dosis superior a la utilizada en el campo), siendo detectado en el embrión de cinco días. La concentración presente en éste se incrementa a lo largo del período de desarrollo embrionario, y se distribuye en todos sus órganos y tejidos”, afirma  la Doctora Adriana Fabra en  el portal de UNRC.sedeco_img_agro

El 2,4-D es neurotóxico. Se absorbe con facilidad a través de la piel o por inhalación y puede causar daños al hígado, a los riñones, a los músculos y al tejido cerebral.

El Glufosinato de amonio, otro de los agroquímicos que trae la “Nueva semilla” aporta aun mas que el Glifosato en materia de malformaciones esta primero en la lista e incluido en los 22 pesticidas que van a desaparecer del mercado según indica la Unión europea.

Según explico Montón esta semilla falta ser aprobada por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) y por los mercados agroalimentarios. Aún no podría ser comercializada.

El Roundup, principal herbicida de Monsanto utilizado en nuestro país, fue prohibido hace una semana en Francia por ser calificado como cancerígeno.

NO HAY PRESUPUESTO

El compromiso que se había mantenido con las organizaciones campesinas por parte de los funcionarios de la cartera de agricultura familiar no fue sostenido.

Emilio Pérsico, Secretario de Agricultura Familiar, fue quien les comunicó a las organizaciones que no estaban vigentes los 1500 millones de pesos que habían sido destinados a las organizaciones campesinas.

Emilio Persico.
Emilio Persico.

El Gobierno destinó 2500 millones de pesos a productores de granos, soja y maíz transgénico. “Nosotros ya lo dijimos en un artículo esto tiene pata de gato, ojo de gato y cola de gato. Esto nos tiene a todas las organizaciones con un gran malestar, más adelante tendremos una reunión y veremos cómo nos posicionamos”, afirmó Livolti.

El referente del MCL aseguró la preocupación de organizaciones cercanas a Pérsico como el Frente Agrario Evita y el MNCI. Los temas fundamentales a resolver, indicó que son: “el presupuesto propio para las organizaciones del campo y el  DNU de las semillas”.

Según Montón el presupuesto debería fijarse como algo estable, como sucede con la educación y la salud y alertó: “los 1500 millones de pesos fue una cifra que acercó Capitanich al Consejo de  la Agricultura Familiar y era estimativa”.

Se mostró cordial con el proceso que se vive puertas adentro de la Secretaria de Agricultura Familiar de la cual el MNCI forma parte desde el 2012. “Se ha conquistado la disputa desde adentro del Ministerio con el diálogo hacia muchos sectores. Dentro del consejo debatimos con funcionarios de diversos ministerios, para poder avanzar con políticas concretas, que están muy lejos hoy de las necesidades que hay en el campo. Es cierto que había una expectativa con este monto de 1500 millones de pesos, pero hubo cambios que produjeron crisis y estamos en un contexto electoral”.

En la voz del MNCI y de la CLOC su integrante insistió sobre el presupuesto, “apuntamos a que se produzca un fortalecimiento e impulso de la agricultura campesina indígena y familiar. Que sea una política de Estado y tenga presupuestos fijados por ley en relación a indicadores proporcionales del PBI tal como lo tiene la salud y la educación”. Montón identifica a Pérsico con un rol positivo vinculado al trabajo de los campesinos e indígenas y a su vez fortaleciendo la economía popular.

Livolti con la voz del MCL enfatizó que están preocupados por la intención de soslayar la Ley de Semillas y por la discusión que debe abrirse puertas adentro para que haya un presupuesto propio para los campesinos.

COVIVIR CON EL AGRO

Respecto al MNCI es de público conocimiento su apoyo al Gobierno Nacional. La postura de articular con entidades del agro en una mesa de diálogo no es aceptada por todas las organizaciones que trabajan la tierra. No obstante el MNCI aceptó este diálogo; “Bergoglio antes de ser Papa propuso una mesa donde se presione a las entidades vinculadas al agronegocio. Donde la iglesia debía condicionar a las empresas del agro. Se convocó a una mesa de diálogo donde participan el Estado, los Movimientos Campesinos, la Sociedad Rural y La Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa  (AAPRESID)”

Montón aclaró que ese dialogo mejora la lucha por la tierra. “Una tierra que produce, pero su producción no es alimento, ni es aprovechado por el Estado en función estratégicó no cumple su función social. La tierra no debe ser una mercancía más”.

LA DEUDA

Los movimientos campesinos e indígenas tienen una deuda pendiente por cobrar con el Estado y es el trabajo de la tierra sin criminalización. Casos como los asesinatos de Cristian Ferreyra del Movimiento Campesino de Santiago del Estero (MOCASE), Miguel Galván también del MOCASE, Javier Chocobar de la comunidad Diaguita de Los Chuschagasta en el norte tucumano. Son algunos de los que marcan claramente la lucha y la disputa por la tierra de los grandes empresarios sojeros, donde la vida de los campesinos queda en el camino.

Monsanto, es el primer enemigo, bien lo afirmó Livolti en la entrevista con este periodista “Enfrente tenemos el modelo del agronegocio,  concebimos que la soja transgénica no es alimento, no la soja en sí misma, sino el modelo guiado por Monsanto y lo que deviene con todo eso”. Hoy esta multinacional que fabrica soja y enfermedades letales es bienvenida en Argentina de la mejor manera para fortalecer “la producción local”.

 

Deja un comentario

Descubre más desde comunicación popular

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo