Por Ludmila Fernández López
Tras una movilización a los Tribunales de Comodoro Py, con un gran apoyo popular feminista, el Juez Rafecas se comprometió en el día de ayer a aceptar la incorporación de las tres militantes de la Campaña Nacional Contra la Violencia hacia las Mujeres (CNCVHM) como parte querellante en la denuncia contra Baby Etchecopar, por instigar a sus oyentes a amenazarlas y acosarlas. Hoy la querella se hizo oficial, y la denuncia se remitió al fuero Criminal y Correccional.
El pasado 4 de mayo, en el marco de una acción realizada por integrantes de la CNCVHM, que exigían que el conductor se retracte por sus dichos violentos tras el femicidio de Micaela García, Etchecopar difundió al aire en su programa radial los números de teléfono de tres voceras de la Campaña e instigó a sus oyentes a que las llamen y hostiguen. Desde ese entonces las militantes vienen sufriendo un acoso sistemático e ininterrumpido, que incluye amenazas de muerte y de violación
Para dejar en claro que este tipo de acciones ya no pueden quedar impunes, la CNCVHM, con el patrocinio de CORREPI y el Colectivo de Abogadxs Populares La Ciega, presentaron una denuncia penal donde se incluye entre los cargos la instigación a cometer delito, la intimidación pública y la apología del crimen.
Días después del femicidio de Micaela García, Etchecopar se había pronunciado con un discurso justificativo de los violadores y femicidas, bajo el argumento de que las nenas “provocan” a los “degenerados”, y que ellos no tienen la culpa. Fueron esos dichos los que desencadenaron los escraches que lograron la suspensión de numerosos espectáculos del conductor a lo largo del país. Tras una acción de la Campaña frente al edificio de Radio 10, Etchecopar difundió los teléfonos de las voceras y alentó a sus oyentes a que las violenten. Ayer se cumplieron dos meses de acosos incesantes vía telefónica, mediante llamados y mensajes, de múltiples números anónimos, sobre las tres mujeres que el conductor llamó a acosar.
Aunque la Justicia intentó restarle importancia a las acciones del misógino conductor al pretender catalogar el delito como una contravención, es importante señalar que sus dichos, así como sus amenazas y su apología de la violación y el femicidio, constituyen una violación de la Ley 26.485 de Prevención y Erradicación de la Violencia contra las Mujeres, que rige en nuestro país desde 2009, y son un claro caso de violencia mediática y simbólica. Con la aceptación oficial de la querella, las militantes damnificadas podrán ejercer su derecho a denunciar las amenazas y centrarán el caso en torno a Etchecopar, por ser el autor intelectual de las mismas y por ejercer la violencia misógina de manera sistemática mediante el poder que le dan los micrófonos de las empresas donde trabaja.
1 comentario
Para comentar debe estar registrado.