Por Maria Del Monte
El viernes pasado se llevó a cabo el 8M con el tercer paro Internacional Feminista y Plurinacional de mujeres, lesbianas, travestis y trans. Bajo las consignas:
“Basta de femicidios, lesbicidios y travesticidios”
“Niñas no madres”
“Aborto legal, seguro y gratuito “
“Implementación efectiva de la Ley de Educación Sexual Integral “
“Igualdad económica entre mujeres y hombres”
“Vivas y libres”
Miles de mujeres, lesbianas, travestis y trans salieron a tomar las calles, las plazas y las veredas de todo el planeta. Abuelas, hermanas, amigas, niñes, hijas y madres alzaron sus voces para pedir la eliminación de la violencia machista y la presencia del Estado que sigue mirando para otro lado.
En Argentina miles de mujeres marcharon hacia el congreso. En las provincias y pueblos la concentración se hizo en las plazas y en las calles, lo cual destaca la importancia de juntarse en el lugar donde se vive porque es justamente allí donde se vivencia en primera persona las violencias machistas ejercidas por la sociedad patriarcal y misógina. En San Antonio de Areco la grupa de teatro CAPA
(Colectiva de Artistas Performatives Arequeres), salieron a las calles para visibilizar lo que el pueblo esconde.
Vestides todes de negro con máscaras blancas (elemento que despoja a une de su propia identidad), hicieron su intervención en instituciones importantes y generalmente cómplice del machismo como el Hospital, la comisaría, la iglesia y las calles centrales del pueblo. La grupa CAPA se refirió a lo que querían expresar a través de la performance realizada: ” La idea fue hacer visible la violencia que se tapa, bajo el manto de la tradición ese elemento que pone a Areco en relieve como destino turístico, se nutre de la opresión y la violencia ejercida particularmente sobre las mujeres, para exaltar al gaucho hay que someter a la “china” que debe estar siempre disponible. Y esto se ve en la actualidad con la dificultad de resolver los casos de violación a adolescentes, aun cuando estas son menores de edad, porque los violadores siguen libres y eso es un claro mensaje de que no hay justicia. ”
La representación consistió en que algune de la grupa caía al suelo (oprimide), representado un ataque y otres eran indiferentes a esa víctima (opresores indirectes) y caminaban como si nada pasara. Los roles se iban intercambiando dando a entender que si no hay sanación y justicia la persona oprimida puede volverse opresora y así el círculo de la violencia no se corta.
La violencia invisibilizada hacía todas, que nos incluye a todes. “Por eso salimos a mostrar, a decir para que la indiferencia no cubra todo con el cómodo barniz de la invisibilidad que tanto cuidan quienes se refugian en la impunidad y sus múltiples cómplices para seguir violentándonos.”
En lo que va del año 2019 hubo 53 femicidios. Una mujer muere cada 28hs, una cifra verdaderamente alarmante que crece y crece. Esto sin tener en cuenta la violencia machista no denunciada y muchas veces, si es denunciada no se hace nada por parte de las instituciones a la que víctima recurre.
San Antonio de Areco no es la excepción, al contrario, sabe mucho de apañar a violadores. En los pueblos se nota más porque todes nos conocemos y sabemos que existe la impunidad y la complicidad, es por eso que los violadores andan sueltos como si nada refugiándose en sus “contactos”, en el inaccionar de las instituciones y el silencio de la mayoría de les habitantes del pueblo. Pero ahí estamos nosotres para alzar y denunciar con nuestras voces. Pero ahí está la grupa CAPA para denunciar con sus cuerpes.
Porque todes juntes somos manadas. Y decimos: VIVAS y LIBRES NOS QUEREMOS!!!
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