NUNCA MÁS

Por Verónica González

Fotos Ernesto Ferreris y Juan Meza

 

“Mientras haya una esquina y a pesar de todo

y una luna y un tiempo y un bolsillo

mientras haya una mano y una calle

y una boca y un grito

una ventana

Mientras estemos”.

 

Roberto Santoro

Durante el aislamiento obligatorio que nos mantuvo alejados de muchas actividades, sobre todo de aquellas difíciles de sostener de manera virtual, como ser: marchas, reuniones y eventos, pudimos encontrar sin embargo, un modo de resistir desde Ancap.

A lo largo del año pasado y de los meses transcurridos durante este 2021, fuimos conformando un grupo de compañeres que, desde diferentes lugares del periodismo y del arte, decidimos hablar y visibilizar otras realidades a las fomentadas por los medios hegemónicos. Construir pensamiento crítico y desde ahí, que hablen les protagonistas.

Como decía Martín Baró “La verdad de los pueblos latinoamericanos no está en su presente de opresión, sino en su mañana de libertad; la verdad de las mayorías populares no hay que encontrarla sino que hay que hacerla.»

Fue así que, luego de mirarnos durante mucho tiempo a través de una pantalla, decidimos que era el momento de salir, de ocupar espacios públicos y de apostar a la cultura; a las múltiples miradas que fueron participando de cada una de las notas.

La batalla cultural de la que tanto se habla y que en estos últimos años vimos tambalearse, debe ser repensada a través de viejas construcciones para incluir también a todes aquellos de los márgenes.

Decidimos salir, con los cuidados pertinentes dadas las condiciones que nos atraviesan, pero apostando a la calle, haciendo lugar a todes en una plaza en el barrio de Floresta y en una fecha emblemática, el 24 marzo.

Recordar a los 30.000 en un grito que incluya a les desaparecides y asesinades en democracia; a los femicidios y transfeminicios; a las víctimas, como Maia, de un sistema opresor que mantiene a la pobreza en distanciamiento social desde hace siglos.

Para que el Nunca más sea un límite a los arrasamientos subjetivos que sufren les sin techo, les inmigrantes y los pueblos originarios, que vienen dando batalla en diferentes lugares de este país para preservar sus tierras, su cultura y su vida, porque esos genocidios se suceden hace mucho más de 45 años.

De este modo, participaron y se acercaron desde varios puntos de la capital federal y de la provincia de Buenos Aires, integrantes de medios alternativos, quienes compartieron su trabajo comprometido con la realidad que nos atraviesa.

Mariano Pagnuco de la revista Cítrica, hizo referencia a la conformación de la cooperativa que comenzó hace 10 años, luego del cierre del diario Crítica en la Argentina, que se debió a un mal manejo de Jorge Lanata, quien se encontraba a cargo en ese momento.

Las y los trabajadores se organizaron y formaron la Revista Cítrica, que se entrega en papel y también, cuenta con una página web y las redes sociales.

También se refirió y adhirió a la intención de extender el “Nunca más” hacia situaciones que nos interpelan día a día.

Por otro lado, Rodrigo Ferreiro, focalizó su militancia como parte de familiares y amigos de Luciano Arruga e hizo referencia sobre lo que significó un desaparecido en democracia, la participación del aparato represivo con la Policía Bonaerense.

También habló acerca del gran trabajo que llevan a cabo desde la radio “La Retaguardia” con la transmisión de los juicios de lesa humanidad. Un trabajo militante imprescindible para seguir sosteniendo la memoria, la verdad y la justicia.

Mariano de Cítrica, también presentó a Manu, un compañero que nos contó sobre su historia y también acerca de su programa en Radio Sur llamado “La voz de la calle” y sobre su “Proyecto 7”.

Además de los medios alternativos, contamos con la presencia de Lourdes Hidalgo, sobreviviente de la masacre en el ex Taller Clandestino Luis Viale y también con las compañeras que conforman junto a ella “La Comisión por la memoria y justicia de les obreres textiles de Luis Viale”.

Lourdes, manifestó su dolor y su lucha por sus compañeres del taller; contó acerca del horror y la desesperación de ver morir a su compañera embarazada, a un adolescente de 15 años y a los niños que mencionó uno a uno: Elias Carbajal, de 10 años; Rodrigo Carbajal, de 4 años; Luis Quisque, de 4 años y Harry Rodriguez de 3 años.

“¡La ropa que compran para ustedes y sus hijos está manchada con sangre!”, dijo frente a un auditorio conmovido y atento.

Fue uno de los momentos de mayor tristeza pero también de solidaridad y empatía. Muches de les que estaban no conocían la lucha que lleva adelante Lourdes y sus compañeres, y otros tantes, se enteraban ahí mismo, en una plaza de Floresta, lo que había sucedido un 30 de marzo del año 2006, en la calle Luis Viale 1269.

A casi 15 años del incendio, el martes 30 de marzo a las 12 del mediodía, se realizará un acto en el lugar donde acontecieron los hechos, para que nunca olvidemos lo que sucedió allí y lo que sigue sucediendo a plena luz del día, delante de los ojos de todes.

Durante el evento también, se pudo ver la muestra fotográfica sobre el ex taller clandestino “Sobrevivir para contarlo”; fotografías de Osiris Marti, Lidia Barán y Carlos Mamud.

Hubo poesía, música, cuadros del talentoso Martín Vera y el arte en pared del gran artista urbano Lucas.

Contamos también con la presencia y el testimonio de Lorena Ojea sobre la recuperación de las tierras de Guernica y el gran trabajo que están realizando en territorio el colectivo de mujeres. Junto a ella, el dirigente obrero-rural de la Cooperativa de trabajadores rurales de San Vicente, Diego Gandini, nos relató su experiencia sobre lo que vienen haciendo en la zona.

Sergio Otero, desde el Colectivo de Trabajadores de la Salud Bucal, se refirió a la salud como un derecho que vienen sosteniendo y multiplicando desde la organización.

Las guitarras fueron cerrando la jornada junto a la voz de uno de les compañeres con la convicción, cada vez más fuerte, de haber elegido el camino correcto, el de seguir apostando al encuentro, a los lazos que se tejen a través de la solidaridad y la memoria.

Como medio alternativo y popular, tenemos el compromiso y la responsabilidad de comunicar y visibilizar a les que pretenden callar, para que no puedan colocar bajo el manto del olvido hechos terribles como la masacre de Luis Viale.

Como dice Boaventura de Sousa “Sabemos que nos quieren amedrentar, que quieren que el miedo predomine, pero nosotros debemos tener la posibilidad de una esperanza. Esa esperanza debe ser de una sociedad mejor, más justa, a través de otra epistemología, de otra manera de conocer, de vivir, de articular la sociedad”.

Siguiendo este pensamiento, consideramos que debemos preservar la esperanza para que todes tengan la posibilidad de creer y de crear, apostando a la ternura y a la lucha necesaria para realizarlo y que algo distinto surja en un mundo con igualdad de oportunidades y de sueños, porque todes necesitamos soñar para encontrar un sentido y que la vida sea digna de ser vivida.

Porque no olvidamos ni perdonamos. ¡Memoria, Verdad y Justicia!

 

NO ME OLVIDO

No me olvido de Santiago

ni de Rafa.

No me olvido de Luciano

ni de Julio.

No me olvido de Darío

ni de Maxi,

tampoco del ángel de la bicicleta.

No me olvido de Ismael

de los pibes de Floresta.

No me olvido de Mariano

ni de Facundo,

de la suma interminable

de feminidades muertas.

No me olvido de los traidores

de la mirada que prefiere no ver.

No me olvido del olvido,

no entrego el cuerpo para esa vacuna.

No me olvido de tu olvido.

Tengo cada rostro tatuado en la piel.

Verónica González

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