Por Redacción Ancap
Floreal Avellaneda, fue militante de la Federación Juvenil Comunista, a los 14 años secuestrado por la dictadura cívico-militar el 15 de abril de 1976. La última vez que hubo información de su paradero fue en Campo de Mayo. La noche del 15 de abril, un grupo de tareas ingresó en el domicilio de la familia Avellaneda en la localidad de Munro, con el principal objetivo de llevarse secuestrado al padre de Floreal, delegado sindical en la fábrica metalúrgica de Tensa.
En ese momento el padre del Negrito Avellaneda logró escapar, mientras que él, y su madre Iris, fueron secuestrados y torturados en la comisaria de Villa martelli.
“Ahí nos torturaron, a mí y al ‘Negrito’. Me pasaron picana mientras escuchaba las cosas que le hacían a mi hijo. Me ataron en una columna, y ahí escuché la voz del ‘Negrito’ por última vez. ‘Mamá, deciles que papá se escapó’, me alcanzó a decir”, contó Iris en una entrevista a la agencia Telam.
El cuerpo de Floreal Avellaneda apareció en la costa uruguaya el 14 de mayo de 1976, con claros signos de empalamiento. En el mes de agosto de 2009, el Tribunal Oral Federal 1 de San Martín condenó al general Omar Riveros como principal responsable del aberrante crimen cometido.
EL NEGRITO AVELLANEDA
Según la madre su hijo era un joven especial
se notaba que era un pibe siempre dispuesto a luchar.
Apenas faltaba un mes para que cumpliera años
el negrito Avellaneda no era más que un buen muchacho.
Militante comunista como lo era su padre
le encomendaron hacer propaganda en la calle.
Una banda del ejército entró de golpe en su hogar
en busca del dirigente al que no pudieron hallar.
Al irrumpir en su casa empezaron a patear
las puertas una por una de una manera bestial.
Era un grupo de tareas que buscaba a su papá
porque era comunista y delegado gremial.
Furiosos por no encontrarlo porque se pudo escapar
a su esposa y a su hijo decidieron secuestrar.
Se llevaron por la fuerza a la madre y al negrito
al centro de detención denominado “El Campito”.
Un mes después encontraron sobre la costa uruguaya
el cadáver del muchacho en el Río de la Plata.
Él fue una de las víctimas de los Vuelos de la Muerte
atado de pies y manos estaba echada su suerte.
Los forenses comprobaron que Floreal fue empalado
la tortura medieval dejó heridas en su ano.
No delató a ninguno de todos sus compañeros
por eso lo consideran un amigo verdadero.
El joven tenía novia y era muy buen nadador
por las bestias genocidas su corta vida acabó.
El negrito Avellaneda había nacido en Rosario
cuando lo encontraron muerto tenía ya quince años.
Ruben Edgardo Sánchez