Por Entropía Emi
Fotos Entropía Emi
La Ciudad de Buenos Aires se vistió de fiesta para celebrar una nueva marcha del Orgullo. Una ciudad que se viste de “gay friendly”, pero que se encarga sistemáticamente de negar y desconocer derechos conquistados. La comunidad travesti trans viene denunciando hace meses la falta de hormonas, y con esto, el incumplimiento en la Ley de Identidad de Género que establece el acceso, la garantía y la gratuidad en el sistema de salud, y los tratamientos hormonales que sean solicitados.
¡Basta de genocidio/identicidio Travesti Trans! Es un reclamo que llevan a cabo activistas travestis como Marlene Wayar, en la cual hacen responsable al Estado de las persecuciones, violaciones y asesinatos sistemáticos a su comunidad. Un Estado al que conciben como el conjunto de población, territorio, y gobierno. Por lo tanto, la responsabilidad de estos crímenes se extiende más allá de la acción de quien los perpetúa, hacia la omisión de quien lo permite.
No se trata de “aceptación”, “integración”, “inclusión”; se trata de eliminar la jerarquía sexual basada en la cis-hetero-norma. Aquella que sostiene un destino único para todes les sujetes: vivir una sexualidad cis y heterosexual llena de privilegios.
Travas, maricas, tortas, trans, asexuales, intersex; combaten en las calles de Buenos Aires con música, plumas, glitter, besos, abrazos; contra un Estado asesino, genocida e identicida.
Las familias de las niñeces trans también salen a la calle a gritarnos que “¡Los genitales de nuestrxs hijxs no definen su identidad!”.
Es un deber ético de todes (in)formarnos sobre las distintas formas de ser, si es que no queremos ser parte de crímenes por omisión.
¡Basta de crímenes de odio!
¡Basta de genocidio/identicidio travesti trans!
¡Visibilidad y despatologización de las identidades asexuales y no binaries!
¡Cumplimiento de la Ley de Identidad de Género YA!
¡Basta de mutilaciones a cuerpos intersex!
Para comentar debe estar registrado.