A TRES AÑOS DEL FUSILAMIENTO DE RAFAEL NAHUEL

Por Federico Paterno
Foto Reinaldo Ortega

El pasado 25 de noviembre se cumplieron 3 años del fusilamiento del joven mapuche del Alto Bariloche, Rafael Nahuel, asesinado tras la cacería que efectuó Prefectura con más de 120 disparos de balas de plomo y 300 de goma. El violento desalojo del 2017 fue en la zona de Villa Mascardi (Bariloche) en la comunidad Lafken Winkul Mapu, que estaba realizando una recuperación de tierras del pueblo Mapuche.

El grupo Albatros desató la feroz represión, luego esto, sería avalado en todos los medios por la ex Ministra de Inseguridad, Patricia Bulrich. Aún, hasta el día de hoy, los Albatros sostienen que fue un enfrentamiento y que había gente armada con armas de fuego entre les Mapuches. Teoría que Bulrich se encargó de defender durante su mandato. Teoría que es falsa y ficcionada, que sirvió para construir impunidad y más dolor en la familia de Nahuel.

No es novedad que la justicia para los pueblos indígenas no es lenta, es casi nula. Pese a esto su familia junto a organizaciones que acompañan desde el primer día reclaman justicia y memoria. En la fecha que se recuerda su asesinato, familiares de Rafa y hermanes del pueblo Mapuche decidieron cortar la Ruta 40 en memoria del joven de 22 años cobardemente fusilado; “A 3 años de impunidad, no olvidamos el asesinato de Rafael Nahuel Salvo, cuando Prefectura intentó desalojar a la comunidad Lof Lafken Wincul Mapu”, se leía en los volantes que se entregaron en la movilización. En el marco de la causa que continúa abierta, está en espera una tercer pericia de las balas que mataron a Rafa, actualmente por falta de mérito, la justicia decidió dejar libres a los Prefectos procesados.

La Coordinadora del Parlamento Mapuche Tehuelche de Río Negro se pronunció sobre esta fecha y parte del comunicado advierte:
«Al cumplirse hoy tres años del asesinato por la espalda del peñi Rafael Nahuel Yem en manos de la Prefectura Naval Argentina, expresamos que son tres años de injusticia, impunidad y ocultamiento, mientras una parte de la prensa impulsa en la sociedad discursos de odio, racismo y xenofobia continuando la persecución y hostigamiento al Pueblo Mapuche. Son hechos que configuran la evidente realidad que desde la Campaña del Desierto las condiciones para el diálogo nunca son favorables para nuestra gente frente al Estado y la Sociedad».

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